Vinland Saga capítulo 180 del manga (crítica y análisis con spoilers).

El manga de Yukimura continúa, y hoy vengo a hacer un análisis de su último capítulo y de lo que podemos esperar en un futuro. Como cada mes, vemos un poco más del viaje de Thorfinn y compañía, y de cómo estos siguen buscando un sitio en el que asentarse en lo que parece ser ya la tan deseada Vinland.
El capítulo en sí está en la línea de los anteriores, si bien el 179 me gustó más por el clima de incertidumbre al ver que, a pesar de estar en Vinland, las cosas pueden torcerse si no encuentran un buen asentamiento en el que no generen conflictos con los nativos. De todas maneras, si estos tuvieron disputas con el grupo de Leif, no creo que la compañía de Thorfinn sea bien recibida, aunque mejor las teorías después.
En resumen, vemos como Thorfinn insiste en viajar más hacia el sur, donde parece que hay mejores bosques y tierras para pasto donde poder vivir. Ya en tierra, se nos muestra una conversación en un bosque entre este y Hild, y deciden dejarles a los nativos unas bolsas con trigo y diferentes productos para así poder entrar en amistad con ellos y que estos no les ataquen. De este modo, parece que el grupo de Thorfinn se quedará en esa zona por ahora y, al final del capítulo, se puede ver a los indígenas (llamados “skraelings” por los nórdicos) cogiendo los objetos que les han dejado.

En este capítulo se nos muestra que la relación entre Karlsefni y Hild es más cálida que antes. Hild se ha dado cuenta de que ese antiguo chico sediento de sangre ha cambiado por completo, y que ahora pretende hacer un país utópico sin tener que recurrir a la violencia. Asimismo, utópico o no, Thorfinn tiene claro su objetivo y sabe que las cosas podrían volverse en su contra en cualquier momento.
Sinceramente, en lo que llevamos de este arco, el tono del manga se ha vuelto más cómico, lo cual no tiene por qué ser malo, pero en este caso he visto un bajón claro en los capítulos desde más o menos la aparición del hijo de Thorkell. Los capítulos en Islandia en general se me hicieron más pesados y, a la hora de terminar uno, sentía que la trama apenas había avanzado y que lo que sucedía era más trivial; excepto algunos diálogos y flashbacks del viaje a Constantinopla que me parecieron más interesantes. No sé lo que tiene pensado Yukimura para este nuevo arco en las tierras de Vinland, pero espero que le dé un toque más maduro como hizo en la Guerra del Mar Báltico, y que vuelvan los míticos dilemas y dramas humanos que tanto hicieron brillar a esta obra. Por favor Yukimura, recuerda lo que fuiste y danos el digno arco final que esta obra tuya merece.